MUNDO. PONTÍFICE HACE ÉNFASIS EN EL VALOR FAMILIAR.

El Papa defiende el valor del matrimonio y la familia

 BARCELONA, España (DPA). -El papa Benedicto XVI reivindicó hoy "la dignidad y el valor primordial del matrimonio y la familia", durante el rezo del Ángelus que siguió a la ceremonia de consagracción de la monumental iglesia de la Sagrada Familia en Barcelona. 

El matrimonio y la familia son la "esperanza de la humanidad, en la que la vida encuentra acogida, desde su concepción hasta su declive natural", enfatizó el Papa al retomar el hilo central de la homilía que había pronunciado previamente en el interior del templo de la Sagrada Familia, ahora elevado a la categoría de basílica.

Benedicto XVI dedicó las primeras palabras del rezo a la religiosa austríaca Bárbara Maix (1818-1873), fundadora de la Congregación de las Hermanas del Inmaculado Corazón de María, quien fue beatificada el sábado en la ciudad brasileña de Puerto Alegre.

"Que la fe profunda y la ardiente caridad con que ella siguió a Cristo susciten en muchos el deseo de entregar por completo su vida a la mayor gloria de Dios y al servicio generoso de los hermanos, especialmente de los más pobres y necesitados", dijo el Papa al evocar a la madre María Bárbara de la Santísima Trinidad, quien dedicó su vida a atender a huérfanos e hijos de esclavos en Brasil. 

Durante el Ángelus, que se llevó a cabo en la fachada del nacimiento del templo de la Sagrada Familia, el pontífice destacó nuevamente el "genio" del creador de esta impresionante obra, el arquitecto catalán Antoni Gaudí (1852-1926). 

"Inspirado por el ardor de la fe cristiana, (Gaudí) logró convertir este templo en una alabanza a Dios hecha en piedra que, como el nacimiento de Cristo, tuviera como protagonistas a las personas más humildes y sencillas", afirmó el Papa alemán, de 83 años. 

Joseph Ratzinger recordó que Gaudí "diseñó y financió con sus propios ahorros la creación de una escuela para los hijos de los albañiles y para los niños de las familias más humildes del barrio, entonces un suburbio marginado de Barcelona". 

Al término del rezo del Ángelus, Benedicto XVI regresó en el "papamóvil" a la sede del arzobispado de Barcelona para almorzar con los cardenales y obispos que asistieron a la ceremonia de consagración de la iglesia de la Sagrada Familia.